Otra vez, la juventud grita contra los malos métodos, contra los malos profesores. Pero esos malos maestros podrían ser sustituidos. Esos malos métodos podrían ser mejorados. No cesaría, por esto, la crisis universitaria. La crisis es estructural, espiritual, ideológica. La crisis no se reduce a que existen maestros malos. Consiste, prin¬cipalmente, en que faltan verdaderos maestros. Hay en la Universidad algunos catedráticos estimables, que dictan sagaz y cumplidamente sus cursos. Pero no hay un solo ejemplar de maestro de la juventud. No hay un solo tipo de conductor. No hay una sola voz profética, directriz, de leader y de apóstol. Un maestro, uno no más, bastaría para salvar a la Universidad de San Marcos, para purificar y renovar su ambiente enrarecido, morboso e infecundo. Las bíblicas ciudades pecadoras se perdieron por carencia de cinco hombres justos. La Univer¬sidad de San Marcos se pierde por carencia de un maestro"
José carlos Mariátegui
Temas de Educación
En la mañana de hoy 26 de mayo de 2010, el Alma Máter del Magisterio Nacional, ha amanecido radiante de luz, con el accionar tremolante de la nueva generación de Cantuteños. Quienes si bien es cierto se mantuvieron casi arrinconados en todos estos úlltimos años por la autoridad corrupta, así de tan silenciosos iban articulándose y desarrollando su pronta manifestación ante el pueblo y el devenir.
Ya parecía tan extraño de que la juventud universitaria no diga nada, ya parecía casi un paraíso académico la tantas veces postergada Alma Mater el Magisterio Nacional. Sin embargo, como dicen: no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, la juventud cantuteña renace de entre la putrefacción tejida por el Rector y Cía, para decirles una vez más que SÓMOS MUCHÍSIMOS MÁS, los que cultivamos la verdad. Que la juventud en su lozanía rebelde no puede dejarse carcomer por lo senectud de la descomposición moral de sus autoridades y afines.
Es así que los estudiantes de las diversas comunidades y pueblos originarios, han decidido tomar las instalaciones de la que fuera contruida para ser Residencia Estudiantil. Habitaciones que las muy creativas autoridades habían convertido en aulas para estudiantes de la facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, denominándolo "Pabellón A". En donde nos hicieron estudiar casi más de una década y media, sin interesarse en construir verdaderas aulas funcionales donde nos puedan brindar adecuada formación académica, mucho menos pedagógica.
Son más de 800 estudiantes de Convenios quienes conforman la Asociación de Convenios Andino Amazónicos. Son quienes en esta versión de la lucha estudiantil, postergados en todos estos años, sin Residencia y buena atención en los servicios más básicos de la Universidad, procedieron a instalarse en lo que realmente les correspondía desde hace mucho.
Y los estudiantes de la fac. de Ciencias Sociales y Humanidades, comprendiendo su rol formador, entendiendo los procesos históricos, tuvieron la actitud de solidarizarse con la medida de los compañeros, comprenden en su esencia que deben también pelear, reclamar, protestar, en resumen, luchar por lo que realmente les corresponde. Es decir luchar porque les construyan un verdadero pabellón de estudiantes, con auténticas aulas funcionales. Deben de luchar como lo hicieron tantísimas generaciones anteriores pensando en las nuevas, esa es la perspectiva, esa es la proyección. LUCHAR porque su paso en la universidad no sea simplemente una estadía famélica y muribunda de ir a mis clases, responder las tristes preguntas del profesor, ir al comedor, hacer cola para el "burro" y volver a casa y hacer mis tareas. Eso no necesariamente es hacer vida universitaria. Vivirla sin intensidad la preparación profesional, sin marcar las pautas en su proceso es como abrigar en la cabeza un cementerio de neuronas.
Esperemos que no sea sólo un temblorcito, que sea el terremoto que destruye la podredumbre de los que ostentan el poder burocrático, que la mafia esta vez no les gane y que se alcancen verdaderos cambios en su procedencia. No dejarse amilanar mas al contrario conquistar derechos esa es la tradición de lucha de los cantuteños de sangre sabia. Hoy las cátedras de salón han de pasar a desarrollarse en los claustros polémicos propios de la vida estudiantil.
La crisis está dada, la juventud va marcando la pauta otra vez. Queda la solidaridad de los que alguna vez trajinamos por esas lides, y de todos los cantuteños diseminados a lo largo y ancho de la banda cordillarana del Perú.
Atte.
Comp. John Ochoa
Ex Pdte. Federación de estudiantes de la Cantuta.
"Lo que tenemos que aprender; lo aprenderemos haciendo"
viernes, 28 de mayo de 2010
CANTUTA: CRISIS Y SUS GRANDES PERSPECTIVAS
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